04 mayo, 2006

Tarde-noche del martes 2 de mayo. Programa doble en el Baff que sintetiza su bifrontismo. Una conmovedora joya indonesia sobre el amor imposible entre un taxista nocturno y una prostituta preciosa (qué belleza, no era de este mundo), Midnight My Love, seguida de una insufrible memez, Eli, Eli... de fuera, fuera, que me devuelvan los cuartos, básicamente una suma de ruido y caras de palo, sólo apta para pretenciosos confeccionadores de anuarios cinematográficos que encima lucen en la sala una camiseta promocional del festival. Aunque, qué queréis que os diga, durante la proyección de la primera tenía detrás al miembro del jurado David Trueba (un encanto en persona, guardo un gran recuerdo de una entrevista que le hice hace ya años, mano a mano en un bar de la zona alta completamente desierto)y estuve tentado de girarme a sollozarle: "David porqué nos has abandonado haciendo ese bodrio cósmico, esa plasmación perfecta de la vergüenza ajena titulada Bienvenido a casa".